Los restos de Farida, una mujer de 50 años, fueron encontrados el viernes en el vientre de una pitón gigante en el pueblo indonesio de Kalempang, según informan medios locales.
Farida, madre de cuatro hijos, había desaparecido mientras atravesaba un bosque camino al mercado local para vender hortalizas y recargar bombonas de gas. Su esposo, Noni, comenzó a preocuparse cuando Farida no regresó a casa esa noche y salió a buscarla.
Durante la búsqueda, Noni encontró una pitón de 5 metros de largo con un gran bulto en el estómago. Sospechando que la serpiente podría haber devorado a su esposa, llamó a los vecinos para que le ayudaran a examinar al animal. Los vecinos sacrificaron a la pitón, abrieron su estómago y encontraron el cuerpo de Farida.
El jefe de la aldea, Suardi Rosi, explicó: «Después de que el cuerpo fue evacuado del estómago de la serpiente, la víctima fue llevada a la casa de un familiar. Luego, el cuerpo de la víctima fue enterrado por la familia».
Imágenes divulgadas en las redes sociales muestran a un grupo de hombres cortando el estómago de la pitón mientras cubren con mantas el cadáver de la mujer.