República Dominicana.- Unidades navales de la Armada del país rescataron sanos y salvos a 31 hombres y tres mujeres en una yola en la que pretendían llegar ilegalmente a Puerto Rico y estaba a la deriva a 16 millas del noroeste de Uvero Alto, de la provincia La Altagracia.
En la mañana del viernes, las 34 personas fueron trasladadas a puerto seguro y luego a la División de Inteligencia Naval M-2, donde fueron interrogados por oficiales y así determinar de donde partieron.
A través de su Departamento de Relaciones Públicas, la institución sostuvo que una vez fue informada de que una embarcación estaba a la deriva, fueron despachadas varias unidades «por instrucciones del comandante general, vicealmirante Agustín Morillo Rodríguez».
Asimismo, los responsables del frustrado viaje a Puerto Rico, serán sometidos a la justicia.
Nunca voy a entender como es que hay personas que pueden atreverse a arriesgar su vida de esta manera
No tuvieron éxito
Estamos tan bien que miren cómo la gente prefiere irse en yola
¡Qué barbaridad! ¿Y por qué no se quedaron en su país?
¿Por qué no deberían permitirles entrar si buscan una vida mejor?
¡Deberían cobrarles por el rescate! No es justo que paguemos todos por sus errores.
Qué falta de empatía. Todos cometemos errores, nadie está exento. En lugar de señalar con el dedo, ¿por qué no mostramos compasión y solidaridad? Nadie merece ser abandonado en una situación de peligro. Hay que ser más comprensivos.
¡Qué valientes los rescatistas! Pero, ¿deberían los migrantes ser devueltos? ¡Debate intenso!
¡Claro que deberían ser devueltos! Las leyes están para cumplirse y la inmigración ilegal no es la solución. Los rescatistas hacen un trabajo valiente, pero no podemos ignorar las consecuencias de la migración ilegal. Es un debate necesario y urgente.
¿Deberían las personas pagar por su rescate en alta mar? Opiniones, por favor.
¡Qué desperdicio de recursos rescatar a indocumentados! Mejor enfocarse en problemas locales.
¡Qué falta de preparación! Deberían haber evitado la tragedia en primer lugar.
¿Por qué no deportar a los que se arriesgan en yolas? ¡Ya basta de privilegios!
Qué falta de empatía y comprensión. En lugar de demonizar a quienes buscan una vida mejor, deberíamos abordar las causas profundas de la migración y trabajar juntos para encontrar soluciones humanitarias. Todos merecen dignidad y oportunidades, no más odio y división.