EE.UU.- Al menos cuatro mujeres murieron en un tiroteo «relacionado con asuntos domésticos» al sur de Chicago la madrugada del domingo y un sospechoso está bajo custodia, informó la policía local.
El tiroteo mortal ocurrió en la cuadra 7400 de 173rd Place en Tinley Park, un suburbio de una aldea a unas 30 millas al sur de Chicago.
Las víctimas no han sido identificadas y las circunstancias detrás del tiroteo aún no están claras.
Un sospechoso está bajo custodia. Mientras, la investigación está en curso.
Qué absurdo. Un tiroteo no es un acto feminista extremo, es un acto de violencia injustificable. No se puede justificar un crimen con una causa noble. Debemos condenar la violencia en todas sus formas, sin importar la supuesta ideología detrás de ella.
¿Y si en vez de enfocarnos en el arma, hablamos de la salud mental?
Claro, la salud mental es crucial, pero no podemos ignorar el papel de las armas en la violencia. Ambos aspectos deben abordarse para lograr un cambio significativo. No podemos dejar de lado un problema real y tangible para enfocarnos únicamente en uno abstracto.
¿Y si en vez de armar polémica, nos enfocamos en apoyar a las víctimas?
¿Se merecían las mujeres morir? Quizás tenían algo que ver.
¡Qué comentario tan despreciable y sexista! Nadie se merece morir, independientemente de cualquier circunstancia. Insinuar que las mujeres podrían haber tenido algo que ver con su propia muerte es inaceptable. Es importante rechazar y condenar este tipo de mentalidad retrógrada y dañina.
¿Y si en vez de discutir sobre las armas, hablamos de salud mental?
¡No puedo creer que aún haya gente que defienda la posesión de armas!
¿Y si el acceso a armas estuviera más restringido en Illinois? ¡Menos violencia!
Más restricciones en armas no garantizan menos violencia. La solución va más allá de limitar el acceso. Necesitamos abordar las causas raíz como la desigualdad, la educación y la salud mental. No caigamos en soluciones simplistas y superficiales. ¡Hay que profundizar!