Barcelona – Con ayuda de la tecnología un grupo de investigadores han desarrollado un método para profundizar detalladamente cada uno de los depósitos de las proteínas beta-amiloide en el alzhéimer.
El trabajo, que se ha publicado en la revista americana Cell & Bioscience, está liderado por investigadores de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), el Instituto Karolinska (KI) de Suecia y la empresa de biotecnología BioArtic.
Las acumulación de beta-amiloide se han reconocido como uno de los motivos de la enfermedad de Alzheimer, ya que las placas que se generan en el cerebro son tóxicas y son las responsables del progresivo deterioro cognitivo.
Los investigadores han utilizado la microscopia STED (de las siglas en inglés de agotamiento de emisiones estimuladas), que es una tecnología que permite la visualización con súper-resolución.
Esta tecnología ha permitido a los investigadores examinar la estructura y morfología de los agregados beta-amiloide.
Los autores del estudio han examinado secciones cerebrales de ratones con enfermedad de Alzheimer, junto con un nuevo anticuerpo recombinante humano marcado con una fluorescencia que reacciona selectivamente con los agregados de beta-amiloide.
«La capacidad de obtener estas imágenes en animales que hayan estado bajo observación nos ha de permitir entender mejor el desarrollo y progresión de los síntomas», ha explicado la investigadora del Instituto de Neurociencias de la UAB, Lydia Giménez-Llort.
Por su parte, el investigador del Departamento de Neurociencia Clínica del KI y autor del estudio, Björn Johansson, ha indicado que han logrado «una resolución espacial» capaz de «discernir las fibras individuales dentro de las placas, un hito antes sólo posible con microscopia electrónica».
Los autores han resaltado que los estudios que se han realizado anteriormente sobre el alzhéimer con la microscopia de luz convencional han tenido una falta de información sobre las placas beta-amiloides en el origen y desarrollo de la enfermedad.