Singapur/ Manila. (EFE).- Taiwán decretó este martes una alerta meteorológica por el tifón Koinu, que se espera que deje fuertes lluvias en el sur de la isla el miércoles, tras provocar precipitaciones y riesgos de desprendimientos en el norte de Filipinas.
La Agencia Central Meteorológica de Taiwán (CWA, por sus siglas en inglés) emitió hoy una alerta terrestre sobre el tifón, después de emitir otra marítima la víspera, a medida que este se acerca hacia la isla.
En su última actualización, la agencia taiwanesa indica que el tifón se localiza 410 kilómetros al este-sureste de la parte más meridional de Taiwán, moviéndose en dirección noroeste a unos 11-14 kilómetros por hora, con vientos sostenidos de unos 160km/h en el ojo del huracán.
Los meteorólogos de la isla esperan que el tifón pueda aterrizar en el sur de Taiwán el jueves.
Las playas del Parque Nacional Kenting, en el sur, se cerraron al público este martes, y las autoridades locales del condado meridional de Taitung señalaron varias áreas costeras y montañosas de riesgo, según medios locales.
Mientras, la Agencia de Servicios Atmosféricos, Geofísicos y Astronómicos de Filipinas (Pagasa) señaló hoy en su último parte meteorológico que «Jenny», como ha bautizado al tifón en Filipinas, «mantiene su fortaleza mientras se desplaza norte-noroeste sobre el mar de Filipinas».
El norte de Filipinas permanecía este martes en alerta por los potenciales efectos del tifón, que ha potenciado las fuertes lluvias habituales del periodo del monzón del suroeste.
Pagasa alertó hoy del riesgo de fuertes lluvias y deslizamientos de tierra inducidos por los temporales, sobre todo en las zonas más elevadas o montañosas.
Las autoridades filipinas habían informado además de que era poco probable que Jenny tocara tierra en Filipinas, pero las zonas más septentrionales del país ya empezaban a prepararse para las severas lluvias, que se extenderán durante los próximos tres días.
Se prevé que Jenny igualmente continuará intensificando el monzón del suroeste y traerá lluvias ocasionales sobre las partes occidentales de la isla de Luzón, la más grande y más poblada del país.
La Agencia recordó que sigue vigente una advertencia de vendaval para las aguas costeras a lo largo de las costas norte y este de Luzón y pronosticó mares «de moderados a agitados» en diversas partes del archipiélago, por lo que recomendó a los navegantes que tomen medidas de precaución y eviten «aventurarse en el mar».
Filipinas registra unos 20 tifones o tormentas tropicales cada año y padeció en julio los destrozos del Doksuri, que causaron al menos 25 muertes y un reguero de destrucción a su paso por el norte del archipiélago. EFE