El Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI) de Ecuador confirmó la Liberación de los 57 policías y agentes de seguridad retenidos por reclusos en varios penales del país desde hacía 48 horas.
«Los 50 servidores del Cuerpo de Seguridad y Vigilancia Penitenciaria y los 7 miembros policiales que estaban retenidos en 6 centros de privación de libertad ya fueron liberados, pasaron por evaluaciones médicas para verificar su estado de salud y están a buen recaudo», dijo el SNAI en un comunicado.
La entidad a cargo de los penales del país había confirmado con anterioridad que la retención sería en rechazo a un operativo de traslado de reos de una cárcel de la provincia de Cotopaxi (norte).
En un video difundido en las redes el 31 de agosto, un grupo de policías y agentes penitenciarios entre los retenidos instaron al Gobierno del presidente Guillermo Lasso a no tomar decisiones que atentaran contra los derechos humanos de ellos y de los reos.
Es un alivio que los 57 policías y agentes de seguridad hayan sido liberados después de 48 horas de retención.
La liberación de los rehenes es una noticia positiva que muestra que se ha encontrado una solución pacífica.
Critico la retención de rehenes como una acción inaceptable que pone en peligro la seguridad y la paz.
Apoyo la evaluación médica de los liberados para garantizar su salud y bienestar.
Es preocupante que esta retención se haya producido en protesta por un operativo de traslado de reclusos.
La retención de rehenes no es la forma adecuada de expresar preocupaciones sobre los derechos humanos.
El Gobierno debe abordar las preocupaciones legítimas sin recurrir a acciones ilegales como la retención de rehenes.
Es alentador ver a los rehenes y a los reclusos instando al Gobierno a respetar los derechos humanos.
La liberación de los rehenes es un recordatorio de la importancia de la negociación y el diálogo en situaciones de crisis.
Espero que este incidente conduzca a un mayor enfoque en la reforma penitenciaria y el respeto de los derechos humanos.