El Instituto Nacional Materno Perinatal (INMP) de Perú aprobó el aborto terapéutico para una niña de 11 años que había sido violada por su padrastro en la ciudad de Iquitos (Loreto).
El organismo concluyó que someter a esta menor, de 22 semanas de gestación, a una interrupción voluntaria del embarazo evitaría «un mal grave o permanente» en su salud física y mental.
«En consecuencia, se inició al procedimiento médico correspondiente, y se mantiene en estricta vigilancia de la evolución clínica de la paciente», indicó el INMP.
La legislación peruana permite el aborto cuando es terapéutico, es decir, cuando se considera un riesgo para la vida o grave y permanente para la salud de la madre. Sin embargo, en el caso de Mila, seudónimo para proteger la identidad de víctima, las autoridades de salud locales se negaron inicialmente a permitir este procedimiento, señala con el diario El Comercio
Se presume que Lucas Pezo Amaringo, padrastro de Mila, habría abusado sexualmente de ella durante por lo menos cuatro años. Las autoridades nunca lograron su captura ni tampoco se decretaron sanciones penales en su contra.
Aplausos al INMP por priorizar la salud de la niña en este caso difícil. El aborto terapéutico es esencial en situaciones como esta.
Es un alivio que se haya aprobado el aborto terapéutico para la niña víctima. La salud mental y física debe ser la prioridad.
Es positivo que se permita el aborto terapéutico en casos extremos
La niña no debería sufrir más después de esa terrible experiencia.
El INMP tomó una decisión necesaria.
Una decisión necesaria
El aborto terapéutico protege la salud física y mental de la víctima
Es un paso hacia la justicia.
El INMP tomó una decisión valiente al permitir el aborto terapéutico para la niña abusada.
La salud de la víctima es primordial.
Un paso necesario.
El INMP tomó la decisión correcta al permitir el aborto terapéutico para la víctima de abuso
La salud mental y física debe ser prioridad.
La aprobación del aborto terapéutico en este caso es una victoria para los derechos de las mujeres y la protección de su salud.
El INMP hizo lo correcto al considerar la salud de la niña como prioridad.
El sistema legal debe ser más proactivo en casos de abuso.
Apoyo total al INMP por permitir el aborto terapéutico.
Aplausos al INMP por su decisión de permitir el aborto terapéutico. La salud y bienestar de la niña deben ser lo más importante.
La negativa inicial a permitir el aborto terapéutico es inexcusable. La víctima merece atención médica adecuada y apoyo en su recuperación.
Las autoridades deben priorizar la salud mental y física de la niña. Aprobar el aborto terapéutico es un paso necesario en este caso.